miércoles, 31 de mayo de 2017

El foco

Por lo general, no se le considera un instrumento creativo, pero sin embargo lo es
A veces creemos que la creatividad sólo se aplica a problemas y a dificultades. En esos casos suele necesitarse un alto grado de destreza creativa .

Sin embargo, supongamos que usted concentra su atención en algo en lo que nadie se ha detenido a pensar antes. En casos de cuentos, un pensamiento creativo muy pequeño puede producir resultados espectaculares. Incluso competencia no existe, estamos en territorio virgen. Hay inventores que triunfan enfrentándose a unos problemas realmente difíciles y encontrando la solución . Pero otros eligen campos que nadie había notado y, con una pequeña mejora, producen un invento importante. La búsqueda de estos puntos de atención, ignorados e inusuales, constituye una técnica creativa

El cuestionamiento

El “cuestionamiento creativo” es algo muy particular.
¿Por qué esto se hace de este modo?
¿Porque  hay que hacerlo así?
¿Existen otras maneras de hacerlo?
Lo primero qué debemos Tener claro es que el cuestionario creativo difiere totalmente del cuestionamiento crítico. El cuestionamiento crítico trata de evaluar si el modo de hacer efectiva  algo es correcto. El cuestionamiento crítico es un cuestionamiento de juicio. Se dedica a demostrar que algo es defectuoso o erróneo y después intenta mejorar o cambiar la manera como se Realiza. Este es el comportamiento normal del perfeccionamiento.
El cuestionamiento creativo, en cambio, no critica ni juzga ni busca defectos. El cuestionamiento creativo es un incentivo Para lograr la “Singularidad”.
Se dice que el cuestionamiento creativo es una “insatisfacción creativa”. En cierto modo, el concepto transmite la idea de inconformidad por aceptar algo como la única manera posible, pero la palabra “insatisfacción” también Sugiere la idea de imperfección.
Entonces, hay que aclarar que no se trata de emitir juicios y de atacar a lo establecido sino sólo de una exploración de nuevas posibilidades.

La secuencia habitual del pensamiento es accidental: Crítica y ataque, y después búsqueda de una alternativa. La secuencia no es occidental: Reconocimiento de lo existente, búsqueda de alternativas Posibles Y después Comparación con el método vigente.

El concepto y el abanico de conceptos


Un concepto que es una idea se convierte en el punto fijo para otras ideas. Además cada una de estas nuevas alternativas Posibilidades Se convierte en un punto fijo para ideas alternativa. Así usamos dos tipos de conceptos para lanzar alternativas.

Los tres niveles del abanico de concepto son:

a-Direcciones

Conceptos enfoques muy amplios. El más amplio que uno Pueda concebir Se convierte en la dirección.

b-Conceptos

Métodos generales para hacer algo.

c-Ideas

Maneras concretas y específicas de poner en práctica un concepto. Debe Una idea de ser específica; Debe ser posible su puesta en práctica directamente.

Para Construir un abanico de conceptos se empieza por el “propósito” Y después se trabaja Retrocediendo. En cada paso, uno se pregunta: “Y ahora, ¿cómo llego este punto?”. De qué modo se va Retrocediendo desde las direcciones hacia los conceptos, hasta terminar en un conjunto de ideas alternativas. Llegar ahí es precisamente la Finalidad del ejercicio.


El propósito del abanico de conceptos e Proveer un marco general para las ideas alternativas. El marco fuerza las alternativas proporcionando una sucesión de puntos fijos. El abanico Puede Brindar También nuevos puntos focales. Por ejemplo, uno Podría imaginar un concepto pero no Tener una idea aun para ponerlo en acción. En el problema del tráfico el concepto podría ser un “recompensar a las personas que Podrían ir al centro de la ciudad en automóvil pero deciden no hacerlo”. Quizá no haya todavía una manera realizable de realizarlo. Entonces, el concepto se convierte en un punto focal creativo.

Provocación


La técnica de la provocación forma parte de la obra magistral del maltés Edward de Bono, el padre del pensamiento lateral. Para algunos no es estrictamente una técnica para estimular la creatividad, sino un elemento al que puede recurrirse en la fase creativa de cualquier otro método.
La técnica se aplica mediante la expresión de frases o ideas tontas (provocaciones), en donde algo que se asume como cierto no lo es. La frase debe ser realmente estúpida para colocar a la mente en estado de shock, como si recibiera una sacudida eléctrica que la saca del pensamiento preestablecido.
Una vez que hayamos pronunciado la declaración provocativa, el juicio de valor se suspende y la declaración se utiliza para producir ideas. Las provocaciones constituyen puntos de partida originales para el pensamiento creativo.

La Provocación es una especie de experimento mental. Así como muchas nuevas ideas son producto del azar, de un accidento o un error; Estos hechos producen una discontinuidad que nos obliga a rebasar los límites habituales de lo “razonable” establecidos por nuestra experiencia. La Provocación deliberada es un método sistemática que puede producir los mismos efectos. No tenemos que esperar el cambio, el accidente o el error.
Temporalmente podemos ser “locos”, sólo durante treinta segundos cada vez y controlar la situación. Podemos conectarnos y desconectarnos. Por eso la Provocación es un aspecto tan fundamental del pensamiento lateral y de la creatividad en general.

Movimiento

El movimiento es una operación mental extremadamente importante. Es fundamental para la creatividad. Es casi imposible ser creativo sin tener destreza en "movimiento". No es una parte normal de nuestro comportamiento de pensamiento, excepto quizás en la poesía. 
En la lírica nos desplazamos desde las imágenes y las metáforas los significados y los sentimientos. 
El movimiento es considerado un fin de pasar de una idea útil a una provocación o a un concepto conveniente. 
Se puede afirmar que el "movimiento" significa la disposición para desplazarse de una manera positiva e indagadora en vez de detenerse a juzgar  si algo es correcto o no. En la creatividad lo fundamental es conseguir ideas prácticas, válidas y útiles. La diferencia consiste en que la creatividad acepta muchas maneras de alcanzar un objetivo

El pensamiento lateral

Edward de Bono 
El pensamiento lateral 
manual de cratividad 

Al igual que el pensamiento lógico, el pensamiento lateral es una facultad general de la mente que comporta el recurso de utilizar ciertas técnicas. Esta facultad se desarrolla de la manera más eficaz en el contexto de clases específicas dedicadas exclusivamente al tema del pensamiento lateral, sobre la base de ejercicios diseñados especialmente con ese fin. Si se enseña simultáneamente con otros temas, ello no pasa de constituir un simple estímulo y una comprensión del pensamiento lateral cuando casualmente se manifiesta pero no permite su desarrollo como costumbre y como acto consciente y voluntario.
Reservar un período de tiempo definido para la enseñanza del pensamiento lateral es mucho más eficaz que intentar introducir sus principios en el transcurso de clases que versan acerca de otros tema.
Si el pensamiento lateral se enseña asociado a algún otro tema, habrá que dedicar un período de tiempo a su explicación. Recuperando luego el discurso del tema principal.
La enseñanza del pensamiento lateral durante una hora a la semana a lo largo de todo el período de asistencia a la escuela sería suficiente para desarrollar una actividad creativa en los educandos.
Los ejercicios se clasifican en diversos tipos. No debe enseñarse toda una sección en una sola clase. Tampoco debe seguirse necesariamente el orden de los ejercicios. Ello podría facilitar la comprensión del pensamiento latera,  pero no desarrollaría una actitud creativa.
Al usar el pensamiento lateral lo que cuenta, no el conocimiento de un número dado de procesos. Se puede desarrollar una actitud lateral tanto mediante la repetición de una sola técnica como con la enseñanza breve de cada una de las múltiples técnicas.
No hay nada especial en las técnicas. Es la actitud a que dan lugar lo que tiene utilidad.

Pero no es suficiente estimular o aportar únicamente buena voluntad. Si se desea desarrollar una habilidad, debe practicarse en el contexto de unas clases educativas específicas y con ayuda de los medios adecuados. El mejor método de enseñar la esencia del pensamiento lateral es a través del manejo de una serie de instrumentos diseñados especialmente a este fin, ideados para producir el mismo efecto.